Más de 500 personas en Navarra ya han obtenido resultados favorables a través de la Plataforma Navarra Revolving, que lucha contra las cláusulas abusivas de los contratos revolving. Esta plataforma nació en enero de 2022 con el objetivo de ayudar a aquellos que han sido víctimas de este tipo de productos financieros, caracterizados por sus altísimos intereses y comisiones, para que puedan eliminar sus deudas y recuperar el dinero que han pagado de más durante años.
Formada por los despachos de abogados Iribarren Artola Abogados y Bufete Iribarren Ribas, que cuentan con una amplia experiencia en la resolución de casos de cláusulas abusivas, Navarra Revolving ofrece a los consumidores la posibilidad de recalcular su deuda y devolver únicamente el capital que se les prestó, sin pagar intereses ni comisiones adicionales. Además, las entidades financieras deben reembolsar las cantidades cobradas de más a sus clientes.
Se estima que más de 26.000 personas en Navarra tienen tarjetas o créditos revolving, que suman más de 182 millones de euros. Estos productos financieros, pensados para generar altos beneficios a las entidades bancarias, fueron especialmente promocionados tras la crisis de 2008, a menudo por empresas como Wizink Bank, Cofidis y Cetelem, así como otras instituciones como Santander, CaixaBank e Ibercaja.
Los contratos revolving tienen una de las TAE más altas del mercado, superior al 20%, lo que ha sido considerado por el Tribunal Supremo como usurario. A pesar de que la nulidad de estos productos está cada vez más reconocida por los tribunales, muchas personas continúan siendo afectadas por ellos. Navarra Revolving ha sido clave en visibilizar esta problemática y ayudar a que los consumidores puedan recuperar lo que les corresponde.
En los últimos tiempos, algunas entidades financieras han ofrecido a los afectados «ofertas de pago» para liquidar una parte de la deuda, lo que a primera vista parece un alivio. Sin embargo, Navarra Revolving alerta que esta estrategia puede ser un engaño. Aunque el cliente crea que está liquidando una parte de la deuda, en realidad, está pagando más de lo que debería, ya que las entidades incluyen en ese monto los intereses y las comisiones que deberían haberse anulado.